Nuevo programa para fomentar la Actividad Gastronómica en San Isidro
San Isidro es reconocido regionalmente por su amplia oferta gastronómica, atrayendo tanto a vecinas y vecinos del distrito como a personas de municipios vecinos y de la Capital Federal. Sin embargo, a diferencia de otros municipios, San Isidro no tiene una política de fomento de las actividades gastronómicas, perdiendo una oportunidad crucial para impulsar el bienestar y la recreación de su comunidad, así como el desarrollo del mercado local. En este sentido, el Concejal de Unión por la Patria, el Lic. Marcos Alcides Díaz, propuso la creación de un Programa de Promoción de la Actividad Gastronómica. Uno de los puntos que se intenta revertir con esta propuesta, es la drástica caída del consumo, registrándose un descenso del 22% en el primer trimestre del año, en comparación con el mismo periodo del año anterior. En San Isidro no es distinto. Para dar un ejemplo, Chilo, la tradicional heladería artesanal y cafetería ubicada en la localidad de Martínez, cerró sus puertas días atrás y dejará la emblemática esquina que desde hace 85 años ocupaba sobre la avenida Santa Fe, a pocos metros del centro comercial de la calle Alvear. Era uno de los locales más antiguos de San Isidro, y desde esos años se convirtió en un espacio de encuentro para la comunidad, más allá de ser reconocida como una de las fábricas de helados más importantes del distrito. La caída del consumo, y la imposibilidad de poder afrontar el alquiler y el pago de servicios e impuestos, fueron los detonantes de semejante decisión. Por esto, el Concejal Marcos Alcides Díaz propuso días atrás un programa para fomentar la actividad gastronómica, para que desde el Estado Local se implementen medidas específicas y efectivas para contrarrestar la situación económica nacional. “Es crucial evitar el cierre de locales gastronómicos en San Isidro, por lo que urge tomar acciones que apoyen y fortalezcan este sector económico local”, expresó.A su vez, esbozó que: “la situación económica actual requiere que el municipio tome medidas para atenuar sus efectos, promoviendo eventos culinarios que fomenten un mayor consumo. Esto no solo va a beneficiar a las y los comerciantes, sino que también es un incentivo para las familias del distrito, que van a poder aprovechar descuentos y promociones. Y sabemos que si el consumo local aumenta, esto también beneficia al municipio. La gastronomía es un reflejo de la cultura y la identidad local, por lo que incentivar estos eventos puede ayudar a fomentar el ocio y el disfrute de la población. Promover la actividad no solo revitalizará el entorno social y cultural de San Isidro, sino que también contribuirá al desarrollo económico y al fortalecimiento del distrito”.
