Venezuela enfrenta críticas por arrestos antes de la votación

Venezuela enfrentó el jueves una creciente ola de críticas internacionales por el arresto de dos altos asesores de la líder opositora María Corina Machado, un creciente rival del presidente Nicolás Maduro.

Argentina, Uruguay, Chile y Canadá condenaron los últimos arrestos, calificándolos de un revés en el período previo a las elecciones presidenciales del 28 de julio.

El gobierno del presidente Javier Milei en Buenos Aires dijo que «condena enérgicamente y expresa su absoluto repudio a la detención arbitraria por parte de las autoridades venezolanas de Henry Alviarez y Dignora Hernández, dirigentes de Vente Venezuela y al giro de órdenes de aprehensión contra otros dirigentes de esa agrupación política». «

El secretario general de la ONU, António Guterres, también advirtió contra acciones que interferirían con el proceso de elección presidencial de Venezuela, dijo el jueves el portavoz Farhan Haq.

Alviarez y Hernández, los dos ayudantes de Machado, fueron detenidos el miércoles y aún no han tenido comunicación con sus abogados, dijo el partido Vente Venezuela de Machado en la red social X.

La Cancillería de Chile dijo que las detenciones constituyeron «una acción contraria al espíritu democrático que debe prevalecer en cualquier proceso electoral».

Perú habló de una «creciente limitación al ejercicio del derecho a la participación ciudadana de todos los sectores políticos en Venezuela».

Argentina dijo que las detenciones fueron un duro golpe para «el surgimiento de nuevos liderazgos políticos y su legitimación por parte de la ciudadanía».

En un comunicado emitido por la Cancillería, Buenos Aires pidió la «pronta liberación de los líderes detenidos» y «el cese de las detenciones arbitrarias de representantes de la oposición», acusando al gobierno de Maduro de actuar «contrariamente al espíritu democrático» y llevando a cabo «una reactivación sistemática» de las violaciones de derechos humanos.

Siete de los colaboradores de Machado ya han sido detenidos, mientras que otros siete son buscados por los tribunales, entre ellos la mano derecha de Machado, Magalli Meda, que fue considerada como una alternativa para ser nominada en su lugar.

Las autoridades venezolanas vincularon a Machado, de 56 años, inhabilitado para ejercer cualquier cargo público durante 15 años, con planes de tomar «acciones desestabilizadoras» antes de las elecciones del 28 de julio.

Aunque ni siquiera está en la boleta electoral, Machado es la gran favorita en la carrera. Algunas encuestas sitúan su apoyo en alrededor del 72 por ciento.

Según las reglas electorales, su partido debe decidir antes del lunes a quién registrará como su candidato.

Haq, el portavoz de la ONU, pidió la implementación de buena fe de un acuerdo firmado el año pasado en Barbados por el gobierno de Maduro y la oposición para celebrar una votación libre y justa en 2024 con observadores internacionales presentes.

La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, publicó en X que la declaración de Haq «ignora las amenazas internas y externas contra el pueblo venezolano».

Maduro, ex conductor de autobús y organizador político, busca un tercer mandato en medio de crisis económicas y políticas y una emigración masiva.

El miércoles, Machado acusó que el gobierno venezolano estaba atacando a su partido por temor a perder las elecciones presidenciales.

Las nominaciones oficiales para los candidatos presidenciales se abrieron el jueves.

– TIEMPOS/AFP