Multitudinaria marcha de mujeres en San Miguel
Cientos de mujeres de Bella Vista, Muñiz, Santa María y San Miguel marcharon esta tarde de la Plaza de San Miguel hasta Muñiz. Columnas de mujeres de todas las edades, niñas acompañando a sus madres y hombres poquísimos, pero había. También participaron vecinas de José C. Paz y Malvinas Argentinas. «Ni una menos, vivas nos queremos», la frase más gritada. Muchas llevaban el pañuelo verde, símbolo del pedido de aborto legal, seguro y gratuito.
Con la consigna «construyendo resistencia conurbana», distintos espacios sociales y culturales organizaron y convocaron la marcha que se replicó en diversos puntos del país. Se denunció la inequidad y todas las formas de violencia contra las mujeres, reclamando la igualdad de derecho.
Las dos primeras banderas que se veían, con fondo violeta, tenían decenas de fotos de chicas asesinadas. Los casos exhibidos databan desde 2016 y todos ellos fueron catalogados como femicidios. La marcha fue pacífica, las mismas organizadoras se encargaron de la seguridad y de cortar el tránsito a medida que avanzaba la columna. Promediando la movilización, una señora de unos 60 años con los brazos extendidos se ubicó de frente a las mujeres para que no pasen. «Asesinas», gritó varias veces. Era una mujer que estaba en contra del aborto. La acompañaba una mujer joven. Las organizadoras optaron por pedirle a las personas que pasen por al lado, pero la mujer corría y al menos dos veces se puso al frente. La tensión duró unos pocos minutos. Enseguida las mujeres comenzaron a cantar: «Mujer, escucha, únete a la lucha».
En la marcha hubo familiares y amigos de Camila Cerbino, la joven de 21 años que apareció asfixiada en su casa de José C. Paz días atrás. Con lágrimas en los ojos y nudo en la garganta, exigieron el esclarecimiento del hecho y un rápido accionar del Poder Judicial. La primera autopsia decía «suicidio por asfixia». Gracias a la presentación de nuevas pruebas y la movilización se logró modificar a varias opciones: Homicidio agravado por el vínculo/ suicidio / averiguación de muerte.
Antes de salir a marchar por la Avenida Perón, en la concentración en la Plaza se entregaron volantes con números de teléfono para acudir en caso de violencia de género y un documento que expresaba: «Entendemos a San Miguel como un centro político, por el que transitamos, recorremos a diario o en el que vivimos. Sabemos bien su identidad y tradición fuertemente arraigada a la de la Iglesia Católica y a las Fuerzas Armadas, con Campo de Mayo a la cabeza. Sabemos bien que allí se llevaron a cabo las más crueles torturas a quienes hoy como nosotros quisieron cambiar el mundo», señaló una parte del comunicado que repartieron las organizadoras a las manifestantes.
«Sabemos también que esa tradición conservadora tiñe también los ámbitos institucionales, como hospitales y centros de salud, donde los prejuicios morales terminan interfiriendo en nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y en general sobre nuestra salud sexual y/o reproductiva, causando muerte y enfermedad», agregó el texto.
«Sin ir más lejos, el Estado provincial y municipal no asigna presupuesto para concientizar y erradicar la violencia machista, ni ningún tipo de recurso para que las mujeres de la zona puedan vivir dignamente», se afirmó en el documento.
«Entre San Miguel y José C. Paz hay solo dos refugios para mujeres en situación de violencia y ninguno funciona correctamente, ubicándose a la vista y expuestos, poniendo en riesgo la vida de las mujeres. De esta manera, las mujeres que sufren violencias están a la deriva, sin saber a quién o dónde recurrir».
«A esta situación se le suman los hechos alarmante de discriminación por orientación sexual, siendo el más emblemático el caso de Eva Analía de Jesús «Higui» del Barrio Mariló«, expresó otra parte del comunicado.
Las organizadoras fueron La Herrería Teatro, Espacio Madreselva, Espacio Cumelen, Centro Comunitario Gallo Rojo, Comisión de Généros y Diversidad de Artes Visuales, Comisión de Géneros del Profesorado 42, Correpi, Venceremos, Enraizadas.