El 4 de abril de 2007, el maestro Carlos Fuentealba marchaba por mejoras salariales junto a sus compañeros a la vera de la ruta 22, en el pueblo Arroyito de Neuquén. Fue asesinado por la espalda a quemarropa por el policía provincial Darío Poblete durante un operativo que buscaba impedir un corte de ruta.
A nueve años del fusilamiento de Fuentealba, docentes reclaman castigo a los responsables políticos. Exigen la reapertura de paritarias nacionales y provinciales y blanqueo salarial y el cese de los despidos. Docentes primarios, secundarios, terciarios y universitarios de todo el país realizarán hoy un paro nacional con movilizaciones en todas las provincias. Convocan los gremios del sector. En Capital Federal, la actividad principal se realizará con protestas frente a la Casa de las provincias de Neuquén y Mendoza y desde allí marcha al Ministerio de Educación Nacional.
El hecho causó conmoción y un repudio generalizado y llevó a una declaración de huelga general apoyada por las dos centrales sindicales (CTA y CGT). Simultáneamente los trabajadores de la educación, administrativos y docentes de todo el país llevaron a cabo huelgas, movilizaciones y asambleas masivas bajo consignas como «las tizas no se manchan con sangre», «Sobisch Asesino» y «Nunca Más» entre otras. Exigieron la renuncia y el juicio político al gobernador Jorge Sobisch. Hubo rotura de vidrios e incidentes ante la seccionall policial con estudiantes detenidos. Algunos de ellos, como Tamayo, Baldasarre y Siracusa, denunciaron haber sido torturados por la policía neuquina.
En la región, movilizarán todos los gremios y hoy por la mañana el sindicato de Suteba realizó una conferencia de prensa frente al Consejo Escolar de José C. Paz para reclamar por el gravísimo estado de la infraestructura en las escuelas paceñas.
