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Patricia Bullrich: 'Nos gustaría adaptar el modelo Bukele' a la Argentina

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dice que Argentina está interesada en «adaptar el modelo Bukele», en referencia al enfoque de línea dura del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, frente a los delitos relacionados con las drogas.

En comentarios reportados por los medios locales, Bullrich respondió calurosamente a los comentarios del recientemente reelegido jefe de Estado salvadoreño de que estaría feliz de trabajar y cooperar con el gobierno del presidente Javier Milei en temas de seguridad.

“Estamos interesados ​​en adaptar el modelo Bukele. La violencia en Argentina es fuerte. El pasado fin de semana hubo bajas en el fútbol [matches], ha sido un verano con peleas permanentes. El modelo es complicado, pero estamos viendo un aumento de la violencia de las pandillas o de los enfrentamientos en las discotecas. Nos interesa trabajar en ese tipo de violencia», reveló Bullrich, quien también tiene fama de ser una persona de línea dura contra el crimen.

Tras su victoria electoral el fin de semana pasado, Bukele dijo en una conferencia de prensa el domingo pasado que ya había ofrecido a Argentina la ayuda de este gobierno.

“Le hemos ofrecido oficialmente al ministro Bullrich, no un consejo, sino la cooperación que necesitan y en todo lo de seguridad, de lo cual hemos hablado, pero también en cualquier otro asunto”, dijo el mandatario salvadoreño.

Cuestionado sobre qué ayuda podría brindar su gobierno, Bukele explicó que podría ser “técnica” y relacionada con “el crimen y su legislación”.

Bukele envió a su ministra de Seguridad a Buenos Aires para la toma de posesión de la presidenta Milei el pasado 10 de diciembre y Bullrich reveló que había «hablado del problema» con su par, específicamente «de cómo habían reducido la criminalidad».

“Acordamos programar una visita allí sabiendo que su problema es muy difícil, muy duro, pero que lograron una caída muy significativa. Me sorprendió que apareciera mi nombre, pero aparentemente el ministro lo mencionó. No hemos retomado las conversaciones al respecto”, afirmó Bullrich.

Enfoque controvertido

Bukele, que se proclamó reelegido el domingo 4 de febrero, antes de que se contaran todos los votos, está en el apogeo de su popularidad: se ha descrito como el “dictador genial” que rescató al país de las pandillas y le dio una verdadera democracia. .

Este publicista millennial de 42 años -el presidente más popular de América Latina según el ranking de popularidad de 2023 que rastrea la consultora Latinobarómetro- declaró el pasado fin de semana en la red social X que había ganado por goleada.

“El Salvador nunca tuvo democracia, y ahora por primera vez en su historia la tiene, y no es mi reclamo, es el del pueblo”, afirmó el domingo, mientras respondía preguntas de la prensa sobre si su gobierno reemplazaría al sistema democrático de la nación por otro modelo.

A la guerra de Bukele contra las pandillas se le atribuye la reducción de las tasas de homicidio y la restauración de la seguridad y la dignidad de los ciudadanos de lo que alguna vez fue uno de los países más peligrosos del mundo.

El precio, dicen observadores y víctimas, se paga con arrestos arbitrarios, detenciones inhumanas e incluso torturas, y un miedo de otro tipo.

A petición suya, el Congreso declaró el estado de emergencia en marzo de 2022, bajo el cual más de 75.000 presuntos pandilleros fueron arrestados sin orden judicial y la cifra de homicidios cayó drásticamente. Desde entonces, unas 7.000 personas han sido liberadas por falta de pruebas, pero los activistas dicen que muchos inocentes –incluidos menores– siguen tras las rejas.

Organizaciones de derechos humanos han denunciado detenciones arbitrarias, torturas y muertes en prisión. En respuesta, Bukele los acusa de defender a pandilleros.

La guerra 'antipandillas' ha convertido al «país más peligroso del mundo en el país más seguro del hemisferio occidental», afirmó el domingo el líder de El Salvador, quien afirma que las pandillas han matado al menos a 120.000 personas desde el final de la la guerra civil del país en 1992.

La autoproclamada victoria de Bukele «es el resultado previsible» de acciones de su gobierno «que han logrado una absoluta concentración de poder», afirmó Tamara Taraciuk, directora del Programa Estado de Derecho del Diálogo Interamericano, con sede en Washington.

“La democracia salvadoreña está en juego”, añadió.

– TIEMPOS/PERFIL/NA

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