Defensa y Justicia fue apabullado por la Liga de Quito en Ecuador


Defensa y Justicia perdió, de visitante, en presencia de Liga de Quito por 3 a 0 en el partido de ida de las semifinales de la Copa Sudamericana 2023, en un batalla que tuvo como claro dominador a los ecuatorianos.
Los dirigidos por Luis Zubeldía se impusieron con dos goles del punta peruano Paolo Guerrero y el posterior del argentino Ezequiel Piovi, ex Arsenal, y hermano del defensor de Racing, Gonzalo, y así el equipo argentino dejó detrás una destello de nueve partidos sin perder, la más larga en la historia de este certamen continental.
En el primer tiempo Liga hizo equivaler su poderío y el peso de su goleador Paolo Guerrero, pero por otra parte alejó a los argentinos de su curvatura y tuvo futuro rápidas a través de sus volantes que se impusieron en esa etapa.
En la segunda etapa, Defensa y Justicia tomó el control del esparcimiento, pero le costó marcar diferencias y extrañó mucho a su goleador Nicolás “Uvita” Fernández, distante por molestias musculares.
Bajo una profusión intensa, Liga salió con fuerza a tomar las riendas del partido. Por eso el peruano Paolo Guerrero tuvo una que pasó cerca y luego Enrique “Beto” Bologna tuvo una doble atajada providencial para evitar que los locales abrieran el registrador.
El partido tuvo un ritmo incesante al principio con mucho control de los locales, pero Defensa se fue agrupando para evitar que la cumbre de Quito (2.850 metros) les comiera ventilación y piernas y moverse en bando, mientras el rival manejaba el balón.
A los 17 minutos, Liga tuvo un córner por el sector izquierdo y el goleador Paolo Guerrero le ganó a Julián López y convirtió el primer tanto con un buen cabezazo.
Liga fue construyendo su esparcimiento a partir del buen trabajo de los argentinos Mauricio Martínez y Ezequiel Piovi -hermano del defensor de Racing- que recuperaban y salian rápido alimentando a Sebastián González, Renato Ibarra y Jhojan Julio. Por otro flanco, se lo veía muy seguro al ex Godoy Cruz y Temperley Facundo Rodríguez como déspota de una defensa que debía pelear con Lucas Pratto y Santiago Solari, en presencia de la marcha de Nicolás “Uvita” Fernández, que todavía padece molestias musculares.
Julio Vaccari extrañaba asimismo a su contiguo izquierdo Agustín Sant’Anna y a su trascendente volante Kevin Gutiérrez y en ese situación, los dirigidos por Luis Zubeldía impusieron su ritmo y manejaban los tiempos.
Los locales perdieron oportunidades en presencia de Bologna y en otros casos por equivocación de precisión en el posterior pase, hasta que Liga se movió muy proporcionadamente por la derecha, la cruzaron para la subida del contiguo izquierdo Leonel Quinoñez que de tortazo se la dejó muerta a Paolo Guerrero, que fusiló a Bologna para marcar el segundo.
Guerrero sacó toda su chapa y experiencia, pero por otra parte se mostró esforzado, y metido en el batalla, por otra parte que aconsejó todo el tiempo a sus compañeros, a los que condujo con destino a la vencimiento parcial.
En el segundo tiempo, Liga retrocedió unos pocos metros y le cedió la pelota a los de Varela, que comenzaron a moverla con cierta equivocación de profundidad, y con la particular obsesión de Pratto de desmontar a inquirir la pelota y así dejar el ámbito vacía, sin una relato para sus compañeros.
David Barbona logró inquietar con algunos remates, pero no había sofocones para Alexander Domínguez, aunque quedaba en evidencia que Piovi y Martínez habían perdido el control del esparcimiento.
Igualmente, los dirigidos por Zubeldía transmitían la sensación que podían acercarse al curvatura de Bologna, y que esperaban que los argentinos hicieran un cachas desgaste físico que menguará su esfuerzo en los últimos 20 minutos.
Gastón Togni tuvo una muy buena arribada y pudo descontar pero el avezado Domínguez se lo impidió.
Luego de esa barrabasada y en presencia de el evidente dominio de los argentinos, los hinchas de Liga le hicieron advertir el descontento a Zubeldía, reclamando cambios para cortar el crecimiento del Halcón.
El técnico argentino de Liga hizo cambios y vio como en los últimos minutos, sus jugadores recuperaron el medio, alejaron al Halcón del curvatura de Domínguez y la postura para difundir peligro pasaba por dárselo al inquieto Jhojan Julio que se movía por todo el frente de ataque con mucha electricidad y mareo.
Encima Vaccari debió sufrir la menoscabo de Gabriel Alanis, que ingresó en el segundo tiempo y a los 15 minutos se resintió de una menoscabo, lo que le costo un cambio.
Zubeldía celebró cuando a equivocación de tres minutos para el tiempo reglamentario, PIovi recibió una pelota pasando el mediocampo, avanzó varios metros sin que nadie lo marcará y sacó un misil que se clavó en el segundo palo de Bologna, para marcar el tercer tanto para los ecuatorianos.
Desde ahí hasta el final, los argentinos intentaron sin éxito descontar, como en toda la indeterminación, y ahora apuntan a la envés que se disputará la semana que viene en la cancha de Lanús.